Monday, June 02, 2008

Solá, el agente español de Fecal.

Solá:
De la guerra sucia a la reforma energética
Edgar González Ruiz

El publicista español Antonio Solá Reche, quien en 2006 se dio a conocer como el artífice de la llamada “guerra sucia” contra AMLO, ha sido ahora el encargado de promover en España la controvertida reforma energética.
El viernes pasado, en el Hotel Hesperia, de Madrid, y con el aval de la embajada mexicana en España, Solá estuvo promoviendo los proyectos del gobierno mexicano para atraer inversionistas españoles, en un evento patrocinado por el fideicomiso federal ProMéxico, para difundir el Programa Nacional de Infraestructura 2007-2012, considerado el “plan estrella” del gobierno, para promover las inversiones extranjeras.
En esa ocasión Solá se refirió a la “casi segura” aprobación de la liberación del sector energético, que formaría parte de un esquema donde entrarían también reformas en materia laboral y fiscal. En pequeña escala, algunas empresas de asesoría legal, han estado promoviendo en el sector empresarial los supuestos beneficios (para los empresarios) de las pretendidas reformas laborales, que según esas expectativas significarán menos derechos para los trabajadores.
Las declaraciones de Solá han sido cuestionadas por legisladores de diferentes partidos, incluyendo el PAN, de tal suerte que el diputado panista Gerardo Priego ha considerado como una “falta de respeto” al proceso de discusión sobre ese tema en el ámbito legislativo, la aseveración de Solá de que es “casi segura” la liberación del sector energético mexicano.
En la organización del evento donde Solá fue orador participó la empresa de asesoría de imagen y comunicación, Ostos y Solá, de la que es socio fundador Antonio Solá, quien además de su participación en la guerra sucia del 2006 ha asesorado a gobiernos y políticos panistas, lo mismo que al PP, de su país, en campañas como la que hace unos meses dio como resultado la derrocha del candidato derechista Mariano Rajoy.
Para invitar al evento se enviaron correos electrónicos en los que se ponía al mismo nivel los logotipos de la delegación diplomática mexicana y de la empresa Ostos y Solá, que en España ha apoyado a los movimientos antiabortistas.
Desde hace dos años se han denunciado las actividades políticas de Solá en México, pero en aquel tiempo el español recibió la decidida protección de la Segob y de la SRE, y pese a los intentos que hizo el PAN para “deslindarse” públicamente de su relación con Solá, ahora reaparece nada menos que como promotor del gobierno mexicano en España.
Ya desde la época de Fox, Solá se beneficiaba de su relación con la derecha mexicana, con el expresidente y con la exprimera dama Martha Sahagún, a quien conoció cuando ella era la jefa de prensa del entonces precandidato del PAN a la Presidencia.
“Solá cuidó la imagen de Fox en España, al tiempo que promovió los encuentros informales que tuvo en aquellos días con diversos empresarios y periodistas españoles. Una vez que Fox se convirtió en el candidato, Solá se encargó de llevar la agenda española del aspirante presidencial, lo que le abrió las puertas de los despachos de los máximos dirigentes de Acción Nacional, los mismos que meses después ocuparon las secretarías de Estado del gobierno federal de México.
Sin embargo, la presencia de Solá, hasta entonces discreta y de bajo perfil, adquirió notoriedad cuando Felipe Calderón lo contrató como coordinador de imagen de su campaña proselitista, convirtiéndose en realidad en uno de sus asesores más próximos y en una de las voces más acreditadas para fijar las estrategias electorales”. (Cadena de noticias CDN, 30-05-2008)
Obviamente, ha habido una complicidad de la derecha en el poder para fomentar las actividades de Solá, quien ahora incluso se ha convertido en portavoz de las políticas oficiales, anticipando a la sociedad mexicana que la pretendida disposición al diálogo sobre la reforma energética, por parte del gobierno, es sólo una trampa publicitaria, en las que él es experto, y que a fin de cuentas esas reformas pretenden imponerse a como dé lugar.
Significativamente, se ha dado a un extranjero, como Solá, tramposo y derechista, por añadidura, la misión de abrir a los intereses extranjeros la industria petrolera, nacionalizada en 1938 por Lázaro Cárdenas.

0 Comments:

Post a Comment

<< Home