Provida en Dominicana
Movimientos provida en República Dominicana
Edgar González Ruiz
Pese a que en los últimos años el movimiento provida dominicano ha carecido de una dirección centralizada que coordine sus acciones con las de transnacionales como VHI, el cardenal Nicolás López Rodríguez ha asumido parte de esas funciones jugando un papel protagónico en dicho activismo.
Además de ese prelado, el Opus Dei, que ha mostrado tener considerable influencia en ese país, pese a que se ha establecido allí hace pocos años, ha intervenido también de manera bastante notoria en el activismo provida.
Aunque el gobierno actual de Dominicana está en manos del PRD, fuerza política de izquierda, como en otros países de la región las clases políticas se mantienen respetuosas del poder de la jerarquía católica.
Sede vacante
De acuerdo con un informe reciente de Thomas Euteneuer, dirigente de Vida Humana Internacional, “El Movimiento a favor de la vida en República Dominicana ha estado inactivo desde que su fundadora, Maricarmen Ibáñez, falleciera hace algunos años. VHI está tratando de reactivar el grupo que ella fundó, Provida Dominicana, estableciendo contactos, organizando un congreso o seminario y sesiones de capacitación”.
Maricarmen Ibañez fue, junto con su esposo, Ignacio, encargada del Centro Billings de República Dominicana.
Sin embargo, ha habido otros grupos provida activos en ese país, entre ellos grupos de médicos provida que han denunciado el uso de medicamentos, como Cytotec, para “abortar ilegalmente”.
Además, del 4 al 7 de marzo de 1993, se llevó a cabo en Dominicana el Primer Congreso por la Vida y la Familia, con apoyo de Vida Humana Internacional. En él, Adolfo Castañeda afirmó que “Hay que situar la batalla contra el aborto en su verdadera perspectiva: como una batalla espiritual. Quisiera que quedara claro que la batalla no es directa o principalmente contra seres humanos. La Batalla es contra Satanás mismo...”
El 15 de enero de 2001, la agencia ACI informó que organizaciones provida “manifestaron su preocupación” por declaraciones de la vicepresidenta y secretaria de Educación, Milagros Ortiz Bosch, en el sentido de que “la enseñanza de educación sexual en las escuelas se basará específicamente en evitar el embarazo prematuro y la transmisión de enfermedades”.
“Las asociaciones provida han manifestado su preocupación por el contenido que trasmitirán a través de este programa”
“A pesar de que Ortiz Bosch señaló que se tendrá en cuenta la posición de la Iglesia y que se respetará la postura en este tema del cardenal Nicolás López Rodríguez, arzobispo de Santo Domingo, los grupos provida han considerado que será mucho mayor la presión de los grupos anti-vida”
Cabe señalar que en agosto de 2000, la doctora Milagros Ortiz Bosch se convirtió en la primera mujer electa a la vicepresidencia de la República Dominicana y tomó posesión de su cargo, junto con el presidente Hipólito Mejía.
Antes de llegar a la vicepresidencia, Milagros Ortiz fue senadora y creó la Comisión de Mujeres Asesoras del Senado y su llegada a la vicepresidencia despertó expectativas se sectores liberales y feministas de que promovería la educación sexual en las escuelas.
Empero, Milagros Ortiz, conocida popularmente como “la ratatá”, ha sido virulentamente criticada por sus adversarios políticos, entre ellos el Partido Comunista Dominicano, quienes la acusan, entre otras cosas, de solidarizarse con el expresidente venezolano Carlos Andrés Pérez, así como de nepotismo y corrupción.
Tecnócrata, político y creyente
Tanto Milagros como el presidente Rafael Hipólito Mejía Domínguez llegaron al poder por el Partido Revolucionario Dominicano, una de las tres principales fuerzas de ese país, junto con el Partido de la Liberación Dominicana y el Partido Reformista Social Cristiano.
El ingeniero Hipólito Mejía nació en Gurabi, Santiago, el 22 de febrero de 1941; en 1964, se graduó como perito agrónomo en el Instituto Politécnico de San Cristóbal, de jesuitas.
Estudió también en la Universidad de Carolina del Norte y trabajó en varias empresas tabacaleras, entre otras la compañía norteamericana Rohm and Hass y en 1978, con el triunfo del PRD, su amigo el flamante presidente Antonio Guzmán lo nombró secretario de Agricultura .
Mejía siguió activo en el PRD y en su propaganda de campaña del año 2000 enfatizaba que “puede servirle a su país, por sus conocimientos, su creencia en Dios y en el trabajo en equipo y por su experiencia acumulada como ejecutivo del sector público y privado....”
Ya como presidente electo, el 3 de julio de 2000, Mejía visitó a Juan Pablo II en El Vaticano. El dominicano llegó acompañado de su esposa y con un séquito de once personas.
Según la agencia Zenit, el encuentro duró 15 minutos y en su intercambio de regalos, el Papa le dio a Mejía las medallas del pontificado y recibió a su vez el libro Un hombre de Dios, del fallecido sacerdote Emiliano Tardif, misionero canadiense en Dominicana y gran impulsor del movimiento de la Renovación Carismática.
Luego de recibir la bendición papal, Mejía subrayó ante el pontífice la importancia de la familia.
Discursos arzobispales
El cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez es quizás la principal figura pública que encabeza el activismo provida dominicano,
El cardenal López Rodríguez, nacido en 1936 y ordenado en 1961, es también el responsable de la capellanía militar de Dominicana, institución que existe también en los siguientes países latinoamericanos: Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Chile, Ecuador, El Salvador, Paraguay y Perú.
En agosto de 1993, López Rodríguez participó en la reunión organizada en Río de Janeiro por el Consejo Pontificio para la Familia y donde presetó una conferencia sobre “Familia y Política”, en ella afirmaba que: “,,,en amplios sectores de la población latinoamericana y del Caribe se sigue estimando a la familia y creyendo en la necesidad de su existencia, de su defensa y promoción”
A su vez, define en ese documento a la familia como una “comunidad de personas” caracterizada por la unidad y la indisolubilidad, “las dos propiedades esenciales del matrimonio”.
“En virtud de esas dos propiedades, el matrimonio se convierte en lugar ideal para la realización personal de la pareja y de los demás miembros de la comunidad familiar”
Según López Rodríguez, “Habiendo Dios confiado a la pareja casada la transmisión y custodia de la vida, la misma Iglesia ve la necesidad de destacar la misión de servicio de la familia a la vida, servicio que supone obviamente la procreación, pero que se extiende además a la transmisión y educación en valores auténticamente humanos y cristianos”
En la misma ponencia, López Rodríguez abunda en una retórica que identifica a la liberalización de las costumbres en materia sexual y familiar como un producto del “imperialismo”, y pretende erigirse en promotor de los intereses de “los pobres”.
Señala, por ejemplo, que “La mentalidad antivida se manifiesta en la eutanasia prenatal, pero lleva también a la eliminación de niños apenas nacidos y de los ancianos y enfermos considerados como inútiles, defectuosos o “carga” para la sociedad”.
“...En este contexto deben ponerse los “niños de la calle” que deambulan día y noche sin hogar ni futuro. En algunos países han sido víctimas de campañas de exterminio realizadas por organismos policiales y privados; niños sin familia, sin amor, sin acceso a la educación, es decir, niños en extrema miseria física y moral. Incluso existe un aberrante comercio de niños y niñas, tráfico de órganos y hasta niños utilizados para cultos satánicos”.
Bastante colorido, el alegato de López Rodríguez mezcla cierta dosis de amarillismo con otra de demagogia, pues finalmente el combate de la jerarquía católica a la pobreza y a sus causas suele ser meramente nominal y contradictorio con su práctica de aliarse con los sectores económicamente poderosos.
En su ponencia, López Rodríguez caracteriza las políticas anticonceptivas como una solución a problemas sociales dictada por los intereses de los países poderosos, negando implícitamente que exista el derecho individual a tener relaciones sexuales sin implicaciones reproductivas.
Afirma López Rodríguez: “...llevamos décadas oyendo repetir por todos los medios y formas posibles, que el problema principal de nuestros países es el crecimiento demográfico y que éste debe ser reducido a cualquier costo sin importar la moralidad de los medios usados para conseguirlo”.
Añade: “Podríamos preguntarnos cuáles hubiesen sido las consecuencias si en vez de repartir anticonceptivos y preservativos y de emprender descaradas, abusivas y masivas campañas para promover el aborto, se hubiesen empleado esos fabulosos recursos en fomentar la paternidad responsable, en educar integralmente, en crear múltiples fuentes de trabajo, en ofrecer mejores servicios de salud, etc”
El 2 de febrero del 2000, el arzobispo de Santo Domingo, Nicolás López Rodríguez condenó a la USAID, denominándola “escuadrones de la muerte”, luego de que la esposa del embajador de Estados Unidos en Dominicana hiciera declaraciones “elogiando el gran número de esterilizaciones que se practican a mujeres pobres del país caribeño en clínicas que reciben fondos de Estados Unidos”.
Grupos provida criticaron también a Profamilia, filial dominicana de IPPF, d quien dijeron que es “la organización que más promueve el aborto en el mundo entero”.
Según Vida Humana Internacional Profamilia recibe fondos de la USAID.
En sus críticas, esos grupos fueron apoyados por el Population Research Institute, presidido por Steven W. Mosher, y que es “una institución no lucrativa que se dedica a denunciar el control demográfico realizado por medio de la anticoncepción, la esterilización y el aborto...”
De acuerdo con VHI, el congresista Todd Tihart, de Estadis Unidos, apoyó las protestas provida enviando una carta a la Secretaría de Estado de Estados Unidos donde se decía que “El Cardenal López Rodríguez es el arzobispo de Santo Domingo y expresidente de la Conferencia de obispos latinoamericanos. Es evidente que una persona de su cargo no usaría expresiones tan extremas sin haber sido provocado..”
Sin embargo, lo cierto es que López Rodríguez suele recurrir a una predicación extremadamente agresiva en contra de los proyectos liberales.
Por ejemplo, ha calificado a las organizaciones que considera "proabortistas", como "atrevidas, desconsideradas e irresponsables" y las ha exhortado a abandonar sus actividades "antivida" en los siguientes términos: "dedíquense a promover la vida sana, honesta, de verdad y a no estar recibiendo chequecitos de organismos internacionales que no tienen ningún concepto ni ninguna autoridad moral"
También ha llamado "degenerados" a los homosexuales, "imbéciles" e "irresponsables" a quienes usan métodos anticonceptivos, y "enfadados, partida de ineptos, irresponsables, premios noble de la insensatez, charlatanes" a quienes promueven la anticoncepción de emergencia.
Sin embargo, López Rodríguez ha encontrado también críticos decididos, que le han reprochado el hecho de que a la vez que se opone a la despenalización del aborto, es partidario del “estribillo mano dura, o sea, pena de muerte para los infelices delincuentes de baja monta...”, afirmando que “las autoridades deben recurrir al uso indiscriminado de las armas de muerte para enfrentar a los delincuentes”.
El Partido Comunista de la República Dominicana, que defiende la despenalización del aborto, ha reprobado la actitud del prelado de arremeter “con insultos de todos los calibres contra aquellos ciudadanos que abogamos por la legislación congresional que establezca el derecho al aborto....”
Pero otros religiosos católicos han secundado, desde luego, los ataques de López Rodríguez contra el aborto, a la vez que han criticado duramente la “corrupción” en el gobierno actual, como ocurrió en el sermón de las Siete Palabras, de Semana Santa, en abril de 2003 , por parte del diácono Peter Garrido y el sacerdote Padro Vásquez Paulino.
En esa ocasión, Garrido afirmó que igual que hace casi dos mil años, Jesús llama a los “ladrones de República Dominicana, corruptos, malos administradores, malos padres de familia, los adúlteros, a los malos religiosos, a las prostitutas, y a los ateos a arrepentirse de sus pecados”
Un disfraz
En la polémica sobre al aborto en Dominicana ha salido a relucir, como en otros países latinoamericanos, el contraste entre una legislación rigurosa contra el aborto y las prácticas ampliamente difundidas entre la población en entre la población en edad reproductiva.
El artículo 317 del Código Penal Dominicano castiga a la mujer que aborta intencionalmente con una pena que va de 5 a 20 años de prisión, sanción que se aplica también a los médicos, enfermeras y cirujanos que cooperen con o causen el aborto.
Pero, “aunque la infracción al artículo 317 del Código Penal es frecuente son pocos los casos que llegan a los tribunales”
En un reportaje firmado por Kleiner López, titulado “El aborto tiene un disfraz”, ell periódico dominicano Listín hizo un seguimiento de casos de aborto en los últimos cinco años y encontró sólo uno que llegó a los tribunales, y en el que Rammy Martínez Ramos y Lucas Jiménez Guerrero fueron encarcelados y condenados a pagar indemnizaciones en enero de 2001.
Según ese diario, “En las principales maternidades del país, los legrados se propagan a la velocidad de 150 por semana... Sólo en el Hospital San Lorenzo de los Mina, en la Maternidad Altagracia y en el Hospital de la Mujer Dominicana, del Instituto Dominicano de Seguros Sociales, se hace un promedio de 12 mil 400 intervenciones quirúrgicas al año para extraer restos de fetos que explotan en mil pedazos tras recibir los efectos de procedimientos médicos como la dilatación quirúrgica, o populares como la ingestión de hierbas y el uso de un fármaco llamado Cytotec, cuyo componente principal es una postaglandina”
Homenaje Postal al Opus Dei
En República Dominicana, al igual que en Camerún, el Opus Dei comenzó sus operaciones en 1988 .
Pero ya en 2001, diversos medios de comunicación atribuyeron al Opus Dei la iniciativa para pedir al presidente Hipólito Mejía la implantación del Dia del Nonato en ese país, proyecto que en realidad tiene alcances continentales y que ha alcanzado éxito, por ejemplo, en Argentina, promovido en su época por Menem.
A su vez, “un segmento del movimiento social de mujeres en Santo Domingo y Santiago de los Caballeros, las dos ciudades más importantes del país, ha denunciado los métodos subrepticios, caprichosos e inconsultos utilizados por los promotores de esta ley en la Cámara de Diputados....”
Asimismo, en septiembre de 2002, se anunció que el Instituto Postal Dominicano puso en circulación un timbre conmemorativo del centenario del fallecimiento del fundador del Opus Dei, Josemaría Escrivá de Balaguer.
El director de ese Instituto, Miguel O. Tineo resaltó “aspectos importantes de las enseñanzas del beato”, al poner en circulación la emisión de 50 mil sellos postales, en una ceremonia a la que asistió el vicario delegado del Opus Dei en Dominicana, Javier Bernaola Hortiguela, así como el cardenal López Rodríguez y representantes del Opus Dei en ese país.
El doctor Javier Bernaola también ha residido en Puerto Rico, donde ha sido asesor, o representante, de la Facultad Eclesiástica de Filosofía de la Universidad de Navarra.
Escrivá de Balaguer pasó sólo 36 horas en Dominicana,del 22 al 23 de junio de 1970, debido a una avería en el avión que lo llevaba de México a Roma.
Edgar González Ruiz
Pese a que en los últimos años el movimiento provida dominicano ha carecido de una dirección centralizada que coordine sus acciones con las de transnacionales como VHI, el cardenal Nicolás López Rodríguez ha asumido parte de esas funciones jugando un papel protagónico en dicho activismo.
Además de ese prelado, el Opus Dei, que ha mostrado tener considerable influencia en ese país, pese a que se ha establecido allí hace pocos años, ha intervenido también de manera bastante notoria en el activismo provida.
Aunque el gobierno actual de Dominicana está en manos del PRD, fuerza política de izquierda, como en otros países de la región las clases políticas se mantienen respetuosas del poder de la jerarquía católica.
Sede vacante
De acuerdo con un informe reciente de Thomas Euteneuer, dirigente de Vida Humana Internacional, “El Movimiento a favor de la vida en República Dominicana ha estado inactivo desde que su fundadora, Maricarmen Ibáñez, falleciera hace algunos años. VHI está tratando de reactivar el grupo que ella fundó, Provida Dominicana, estableciendo contactos, organizando un congreso o seminario y sesiones de capacitación”.
Maricarmen Ibañez fue, junto con su esposo, Ignacio, encargada del Centro Billings de República Dominicana.
Sin embargo, ha habido otros grupos provida activos en ese país, entre ellos grupos de médicos provida que han denunciado el uso de medicamentos, como Cytotec, para “abortar ilegalmente”.
Además, del 4 al 7 de marzo de 1993, se llevó a cabo en Dominicana el Primer Congreso por la Vida y la Familia, con apoyo de Vida Humana Internacional. En él, Adolfo Castañeda afirmó que “Hay que situar la batalla contra el aborto en su verdadera perspectiva: como una batalla espiritual. Quisiera que quedara claro que la batalla no es directa o principalmente contra seres humanos. La Batalla es contra Satanás mismo...”
El 15 de enero de 2001, la agencia ACI informó que organizaciones provida “manifestaron su preocupación” por declaraciones de la vicepresidenta y secretaria de Educación, Milagros Ortiz Bosch, en el sentido de que “la enseñanza de educación sexual en las escuelas se basará específicamente en evitar el embarazo prematuro y la transmisión de enfermedades”.
“Las asociaciones provida han manifestado su preocupación por el contenido que trasmitirán a través de este programa”
“A pesar de que Ortiz Bosch señaló que se tendrá en cuenta la posición de la Iglesia y que se respetará la postura en este tema del cardenal Nicolás López Rodríguez, arzobispo de Santo Domingo, los grupos provida han considerado que será mucho mayor la presión de los grupos anti-vida”
Cabe señalar que en agosto de 2000, la doctora Milagros Ortiz Bosch se convirtió en la primera mujer electa a la vicepresidencia de la República Dominicana y tomó posesión de su cargo, junto con el presidente Hipólito Mejía.
Antes de llegar a la vicepresidencia, Milagros Ortiz fue senadora y creó la Comisión de Mujeres Asesoras del Senado y su llegada a la vicepresidencia despertó expectativas se sectores liberales y feministas de que promovería la educación sexual en las escuelas.
Empero, Milagros Ortiz, conocida popularmente como “la ratatá”, ha sido virulentamente criticada por sus adversarios políticos, entre ellos el Partido Comunista Dominicano, quienes la acusan, entre otras cosas, de solidarizarse con el expresidente venezolano Carlos Andrés Pérez, así como de nepotismo y corrupción.
Tecnócrata, político y creyente
Tanto Milagros como el presidente Rafael Hipólito Mejía Domínguez llegaron al poder por el Partido Revolucionario Dominicano, una de las tres principales fuerzas de ese país, junto con el Partido de la Liberación Dominicana y el Partido Reformista Social Cristiano.
El ingeniero Hipólito Mejía nació en Gurabi, Santiago, el 22 de febrero de 1941; en 1964, se graduó como perito agrónomo en el Instituto Politécnico de San Cristóbal, de jesuitas.
Estudió también en la Universidad de Carolina del Norte y trabajó en varias empresas tabacaleras, entre otras la compañía norteamericana Rohm and Hass y en 1978, con el triunfo del PRD, su amigo el flamante presidente Antonio Guzmán lo nombró secretario de Agricultura .
Mejía siguió activo en el PRD y en su propaganda de campaña del año 2000 enfatizaba que “puede servirle a su país, por sus conocimientos, su creencia en Dios y en el trabajo en equipo y por su experiencia acumulada como ejecutivo del sector público y privado....”
Ya como presidente electo, el 3 de julio de 2000, Mejía visitó a Juan Pablo II en El Vaticano. El dominicano llegó acompañado de su esposa y con un séquito de once personas.
Según la agencia Zenit, el encuentro duró 15 minutos y en su intercambio de regalos, el Papa le dio a Mejía las medallas del pontificado y recibió a su vez el libro Un hombre de Dios, del fallecido sacerdote Emiliano Tardif, misionero canadiense en Dominicana y gran impulsor del movimiento de la Renovación Carismática.
Luego de recibir la bendición papal, Mejía subrayó ante el pontífice la importancia de la familia.
Discursos arzobispales
El cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez es quizás la principal figura pública que encabeza el activismo provida dominicano,
El cardenal López Rodríguez, nacido en 1936 y ordenado en 1961, es también el responsable de la capellanía militar de Dominicana, institución que existe también en los siguientes países latinoamericanos: Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Chile, Ecuador, El Salvador, Paraguay y Perú.
En agosto de 1993, López Rodríguez participó en la reunión organizada en Río de Janeiro por el Consejo Pontificio para la Familia y donde presetó una conferencia sobre “Familia y Política”, en ella afirmaba que: “,,,en amplios sectores de la población latinoamericana y del Caribe se sigue estimando a la familia y creyendo en la necesidad de su existencia, de su defensa y promoción”
A su vez, define en ese documento a la familia como una “comunidad de personas” caracterizada por la unidad y la indisolubilidad, “las dos propiedades esenciales del matrimonio”.
“En virtud de esas dos propiedades, el matrimonio se convierte en lugar ideal para la realización personal de la pareja y de los demás miembros de la comunidad familiar”
Según López Rodríguez, “Habiendo Dios confiado a la pareja casada la transmisión y custodia de la vida, la misma Iglesia ve la necesidad de destacar la misión de servicio de la familia a la vida, servicio que supone obviamente la procreación, pero que se extiende además a la transmisión y educación en valores auténticamente humanos y cristianos”
En la misma ponencia, López Rodríguez abunda en una retórica que identifica a la liberalización de las costumbres en materia sexual y familiar como un producto del “imperialismo”, y pretende erigirse en promotor de los intereses de “los pobres”.
Señala, por ejemplo, que “La mentalidad antivida se manifiesta en la eutanasia prenatal, pero lleva también a la eliminación de niños apenas nacidos y de los ancianos y enfermos considerados como inútiles, defectuosos o “carga” para la sociedad”.
“...En este contexto deben ponerse los “niños de la calle” que deambulan día y noche sin hogar ni futuro. En algunos países han sido víctimas de campañas de exterminio realizadas por organismos policiales y privados; niños sin familia, sin amor, sin acceso a la educación, es decir, niños en extrema miseria física y moral. Incluso existe un aberrante comercio de niños y niñas, tráfico de órganos y hasta niños utilizados para cultos satánicos”.
Bastante colorido, el alegato de López Rodríguez mezcla cierta dosis de amarillismo con otra de demagogia, pues finalmente el combate de la jerarquía católica a la pobreza y a sus causas suele ser meramente nominal y contradictorio con su práctica de aliarse con los sectores económicamente poderosos.
En su ponencia, López Rodríguez caracteriza las políticas anticonceptivas como una solución a problemas sociales dictada por los intereses de los países poderosos, negando implícitamente que exista el derecho individual a tener relaciones sexuales sin implicaciones reproductivas.
Afirma López Rodríguez: “...llevamos décadas oyendo repetir por todos los medios y formas posibles, que el problema principal de nuestros países es el crecimiento demográfico y que éste debe ser reducido a cualquier costo sin importar la moralidad de los medios usados para conseguirlo”.
Añade: “Podríamos preguntarnos cuáles hubiesen sido las consecuencias si en vez de repartir anticonceptivos y preservativos y de emprender descaradas, abusivas y masivas campañas para promover el aborto, se hubiesen empleado esos fabulosos recursos en fomentar la paternidad responsable, en educar integralmente, en crear múltiples fuentes de trabajo, en ofrecer mejores servicios de salud, etc”
El 2 de febrero del 2000, el arzobispo de Santo Domingo, Nicolás López Rodríguez condenó a la USAID, denominándola “escuadrones de la muerte”, luego de que la esposa del embajador de Estados Unidos en Dominicana hiciera declaraciones “elogiando el gran número de esterilizaciones que se practican a mujeres pobres del país caribeño en clínicas que reciben fondos de Estados Unidos”.
Grupos provida criticaron también a Profamilia, filial dominicana de IPPF, d quien dijeron que es “la organización que más promueve el aborto en el mundo entero”.
Según Vida Humana Internacional Profamilia recibe fondos de la USAID.
En sus críticas, esos grupos fueron apoyados por el Population Research Institute, presidido por Steven W. Mosher, y que es “una institución no lucrativa que se dedica a denunciar el control demográfico realizado por medio de la anticoncepción, la esterilización y el aborto...”
De acuerdo con VHI, el congresista Todd Tihart, de Estadis Unidos, apoyó las protestas provida enviando una carta a la Secretaría de Estado de Estados Unidos donde se decía que “El Cardenal López Rodríguez es el arzobispo de Santo Domingo y expresidente de la Conferencia de obispos latinoamericanos. Es evidente que una persona de su cargo no usaría expresiones tan extremas sin haber sido provocado..”
Sin embargo, lo cierto es que López Rodríguez suele recurrir a una predicación extremadamente agresiva en contra de los proyectos liberales.
Por ejemplo, ha calificado a las organizaciones que considera "proabortistas", como "atrevidas, desconsideradas e irresponsables" y las ha exhortado a abandonar sus actividades "antivida" en los siguientes términos: "dedíquense a promover la vida sana, honesta, de verdad y a no estar recibiendo chequecitos de organismos internacionales que no tienen ningún concepto ni ninguna autoridad moral"
También ha llamado "degenerados" a los homosexuales, "imbéciles" e "irresponsables" a quienes usan métodos anticonceptivos, y "enfadados, partida de ineptos, irresponsables, premios noble de la insensatez, charlatanes" a quienes promueven la anticoncepción de emergencia.
Sin embargo, López Rodríguez ha encontrado también críticos decididos, que le han reprochado el hecho de que a la vez que se opone a la despenalización del aborto, es partidario del “estribillo mano dura, o sea, pena de muerte para los infelices delincuentes de baja monta...”, afirmando que “las autoridades deben recurrir al uso indiscriminado de las armas de muerte para enfrentar a los delincuentes”.
El Partido Comunista de la República Dominicana, que defiende la despenalización del aborto, ha reprobado la actitud del prelado de arremeter “con insultos de todos los calibres contra aquellos ciudadanos que abogamos por la legislación congresional que establezca el derecho al aborto....”
Pero otros religiosos católicos han secundado, desde luego, los ataques de López Rodríguez contra el aborto, a la vez que han criticado duramente la “corrupción” en el gobierno actual, como ocurrió en el sermón de las Siete Palabras, de Semana Santa, en abril de 2003 , por parte del diácono Peter Garrido y el sacerdote Padro Vásquez Paulino.
En esa ocasión, Garrido afirmó que igual que hace casi dos mil años, Jesús llama a los “ladrones de República Dominicana, corruptos, malos administradores, malos padres de familia, los adúlteros, a los malos religiosos, a las prostitutas, y a los ateos a arrepentirse de sus pecados”
Un disfraz
En la polémica sobre al aborto en Dominicana ha salido a relucir, como en otros países latinoamericanos, el contraste entre una legislación rigurosa contra el aborto y las prácticas ampliamente difundidas entre la población en entre la población en edad reproductiva.
El artículo 317 del Código Penal Dominicano castiga a la mujer que aborta intencionalmente con una pena que va de 5 a 20 años de prisión, sanción que se aplica también a los médicos, enfermeras y cirujanos que cooperen con o causen el aborto.
Pero, “aunque la infracción al artículo 317 del Código Penal es frecuente son pocos los casos que llegan a los tribunales”
En un reportaje firmado por Kleiner López, titulado “El aborto tiene un disfraz”, ell periódico dominicano Listín hizo un seguimiento de casos de aborto en los últimos cinco años y encontró sólo uno que llegó a los tribunales, y en el que Rammy Martínez Ramos y Lucas Jiménez Guerrero fueron encarcelados y condenados a pagar indemnizaciones en enero de 2001.
Según ese diario, “En las principales maternidades del país, los legrados se propagan a la velocidad de 150 por semana... Sólo en el Hospital San Lorenzo de los Mina, en la Maternidad Altagracia y en el Hospital de la Mujer Dominicana, del Instituto Dominicano de Seguros Sociales, se hace un promedio de 12 mil 400 intervenciones quirúrgicas al año para extraer restos de fetos que explotan en mil pedazos tras recibir los efectos de procedimientos médicos como la dilatación quirúrgica, o populares como la ingestión de hierbas y el uso de un fármaco llamado Cytotec, cuyo componente principal es una postaglandina”
Homenaje Postal al Opus Dei
En República Dominicana, al igual que en Camerún, el Opus Dei comenzó sus operaciones en 1988 .
Pero ya en 2001, diversos medios de comunicación atribuyeron al Opus Dei la iniciativa para pedir al presidente Hipólito Mejía la implantación del Dia del Nonato en ese país, proyecto que en realidad tiene alcances continentales y que ha alcanzado éxito, por ejemplo, en Argentina, promovido en su época por Menem.
A su vez, “un segmento del movimiento social de mujeres en Santo Domingo y Santiago de los Caballeros, las dos ciudades más importantes del país, ha denunciado los métodos subrepticios, caprichosos e inconsultos utilizados por los promotores de esta ley en la Cámara de Diputados....”
Asimismo, en septiembre de 2002, se anunció que el Instituto Postal Dominicano puso en circulación un timbre conmemorativo del centenario del fallecimiento del fundador del Opus Dei, Josemaría Escrivá de Balaguer.
El director de ese Instituto, Miguel O. Tineo resaltó “aspectos importantes de las enseñanzas del beato”, al poner en circulación la emisión de 50 mil sellos postales, en una ceremonia a la que asistió el vicario delegado del Opus Dei en Dominicana, Javier Bernaola Hortiguela, así como el cardenal López Rodríguez y representantes del Opus Dei en ese país.
El doctor Javier Bernaola también ha residido en Puerto Rico, donde ha sido asesor, o representante, de la Facultad Eclesiástica de Filosofía de la Universidad de Navarra.
Escrivá de Balaguer pasó sólo 36 horas en Dominicana,del 22 al 23 de junio de 1970, debido a una avería en el avión que lo llevaba de México a Roma.
posted by Edgar González Ruiz at 11:32 PM
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