Negroponte y el Plan México
JUEGOS DE PODER
NEGROPONTE IMPULSOR DEL PLAN MÉXICO
Por Rodolfo Sánchez Mena (LD 05-11-07)
E-mail: sanchezmena@yahoo.com
La importancia del Plan México para el gobierno de Bush quedó ampliamente demostrada al enviar como promotor del Plan a John Dimitri Negroponte, para entrevistarse con los altos mandos del gobierno mexicano, congresistas y hombres de negocios.
La propuesta del Plan México no es bien recibida por los mexicanos. Aun demostrando como se pretende, que un tercio de la población aprueba inclusive la presencia de tropas norteamericanas, esto no significa un cambio significativo en la cultura política de los mexicanos. El que un tercio de la población se manifiesta a favor de una medida que incluya la presencia de tropas extranjeras, queda reducida solamente al porcentaje de la población que votó por Felipe Calderón a la Presidencia. Esto es, solo uno de cada tres mexicanos, como lo demostraron las elecciones mexicanas y las últimas encuestas, tiene preferencias por el PAN y acaso, por la aprobación del Plan México.
Lo que no ha sido sometido a una encuesta ni sondeo, es la opinión de los mexicanos ante una eventual integración de México a los Estados Unidos y la disolución de nuestro Estado-Nación.
Del ramo de zanahorias prometido por Bush, 500 millones, el Sr. Negroponte solo trajo unas hojitas con las partidas que serán distribuidas a las dependencias del Ejecutivo federal involucradas en el combate al narcotráfico, al tráfico de armas, de personas, dinero y acciones terroristas. Todo en papel, pues allá serán las compras y acá el acuse de recibo.
Negroponte se ha destacado en la comunidad de inteligencia, después del S/II concentró las áreas y dependencias de inteligencia y seguridad norteamericana. Ha acumulado un gran poder, como pocos.
Al ser entrevistado sobre el Plan México por Jorge Menéndez, su experiencia quedó manifiesta al declarar lo menos posible y decir lo menos que se pueda. Es un hombre sin emociones en el rostro. Hierático. Ni un músculo del rostro mueve ni para sonreír, o para poner énfasis en nada. Sus ojos carecen de expresión; ni el menor brillo asoma en ellos para matizar cualquier expresión del lenguaje. La sincronización que ha logrado entre las verbalizaciones y sus expresiones faciales, son las del actor político consumado.
Así, por Negroponte nos enteramos que el Plan México no es un mecanismo vinculado con el ASPAN, esto es, el plan de seguridad no tiene que ver, según el enviado de Washington, para impulsar el plan México con la integración de México a los Estados Unidos. Cada programa tiene que ser negociado aparte, dice.
En la versión “negropontiana” los ataques guerrilleros del EPR a los ductos de PEMEX y su influencia en la formulación del Plan México, aseguró desconocerlos, pues dijo no tener información del EPR y por lo tanto carecía de opiniones al respecto.
El que el jefe de inteligencia, Dimitri, carezca de información sobre el EPR es una verdadera novedad, toda vez que las acciones de los grupos terroristas en cualquier parte del mundo se aprueban sobre el tablero donde se decide cuándo y en qué momento actúan.
De igual forma, no escapan a sus decisiones las actuaciones de los grupos criminales del narcotráfico, así como su destino. Por eso es un hombre con poderes, con capacidad de persuasión y negociación.
La promoción personal que realiza Dimitri Negroponte del Plan México habla de la necesidad de hacer los vínculos directos entre las dependencias participantes, los congresistas mexicanos más influyentes y los hombres de negocios, para tener su pulso ante un eventual inicio de actividades y evitar que se desplome en su primer año de operación, por el rechazo de la mayoría de la población a la participación del gobierno norteamericano en un programa contrainsurgente de indudables costos sociales y políticos
NEGROPONTE IMPULSOR DEL PLAN MÉXICO
Por Rodolfo Sánchez Mena (LD 05-11-07)
E-mail: sanchezmena@yahoo.com
La importancia del Plan México para el gobierno de Bush quedó ampliamente demostrada al enviar como promotor del Plan a John Dimitri Negroponte, para entrevistarse con los altos mandos del gobierno mexicano, congresistas y hombres de negocios.
La propuesta del Plan México no es bien recibida por los mexicanos. Aun demostrando como se pretende, que un tercio de la población aprueba inclusive la presencia de tropas norteamericanas, esto no significa un cambio significativo en la cultura política de los mexicanos. El que un tercio de la población se manifiesta a favor de una medida que incluya la presencia de tropas extranjeras, queda reducida solamente al porcentaje de la población que votó por Felipe Calderón a la Presidencia. Esto es, solo uno de cada tres mexicanos, como lo demostraron las elecciones mexicanas y las últimas encuestas, tiene preferencias por el PAN y acaso, por la aprobación del Plan México.
Lo que no ha sido sometido a una encuesta ni sondeo, es la opinión de los mexicanos ante una eventual integración de México a los Estados Unidos y la disolución de nuestro Estado-Nación.
Del ramo de zanahorias prometido por Bush, 500 millones, el Sr. Negroponte solo trajo unas hojitas con las partidas que serán distribuidas a las dependencias del Ejecutivo federal involucradas en el combate al narcotráfico, al tráfico de armas, de personas, dinero y acciones terroristas. Todo en papel, pues allá serán las compras y acá el acuse de recibo.
Negroponte se ha destacado en la comunidad de inteligencia, después del S/II concentró las áreas y dependencias de inteligencia y seguridad norteamericana. Ha acumulado un gran poder, como pocos.
Al ser entrevistado sobre el Plan México por Jorge Menéndez, su experiencia quedó manifiesta al declarar lo menos posible y decir lo menos que se pueda. Es un hombre sin emociones en el rostro. Hierático. Ni un músculo del rostro mueve ni para sonreír, o para poner énfasis en nada. Sus ojos carecen de expresión; ni el menor brillo asoma en ellos para matizar cualquier expresión del lenguaje. La sincronización que ha logrado entre las verbalizaciones y sus expresiones faciales, son las del actor político consumado.
Así, por Negroponte nos enteramos que el Plan México no es un mecanismo vinculado con el ASPAN, esto es, el plan de seguridad no tiene que ver, según el enviado de Washington, para impulsar el plan México con la integración de México a los Estados Unidos. Cada programa tiene que ser negociado aparte, dice.
En la versión “negropontiana” los ataques guerrilleros del EPR a los ductos de PEMEX y su influencia en la formulación del Plan México, aseguró desconocerlos, pues dijo no tener información del EPR y por lo tanto carecía de opiniones al respecto.
El que el jefe de inteligencia, Dimitri, carezca de información sobre el EPR es una verdadera novedad, toda vez que las acciones de los grupos terroristas en cualquier parte del mundo se aprueban sobre el tablero donde se decide cuándo y en qué momento actúan.
De igual forma, no escapan a sus decisiones las actuaciones de los grupos criminales del narcotráfico, así como su destino. Por eso es un hombre con poderes, con capacidad de persuasión y negociación.
La promoción personal que realiza Dimitri Negroponte del Plan México habla de la necesidad de hacer los vínculos directos entre las dependencias participantes, los congresistas mexicanos más influyentes y los hombres de negocios, para tener su pulso ante un eventual inicio de actividades y evitar que se desplome en su primer año de operación, por el rechazo de la mayoría de la población a la participación del gobierno norteamericano en un programa contrainsurgente de indudables costos sociales y políticos
1 Comments:
saludos amigos y compañeros desde la juventud socialista de chile.
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