Ante el fraude, movilización popular
En vísperas de la marcha que mañana partirá del Museo de Antropología, a las 11 AM hacia el Zócalo capitalino, en defensa de la democracia y del bienestar popular, se ha intensificado la manipulación mediática que pretende desorientar y desinformar, negar los hechos que estamos presenciando cotidianamente.
Algunas estaciones de radio, que tienen su público en sectores como los taxistas, expuestos muchas horas a sus mensajes, tratan de desanimar a la gente para que no asista a la manifestación, a la vez que cultivan el odio y la agresión contra quienes apoyamos el triunfo de AMLO.
Cada día es más evidente el linchamiento televisivo contra AMLO, que protagonizan personajes como López Dóriga y muchos otros, que no pueden evadir su responsabilidad histórica al apoyar los intereses derechistas.
Hay una cohorte de periodistas que han hecho del ataque a López Obrador el tema principal de sus colaboraciones. Al apoyar indirectamente, y algunos incluso de manera directa, la continuidad del PAN en el poder, ellos están promoviendo decisiones como las de procurar la impunidad de la familia presidencial y los corruptos polìticos del blanquiazul, aumentar sus privilegios, preservar las pensiones millonarias que se pagan a los expresidentes; en fin, fortalecer los hábitos monárquicos que ha estado promoviendo el gobierno de Fox.
Asimismo, si Fecal llega al poder es un hecho la privatización de Pemex y el total entreguismo del país a los intereses estadounidenses, lo cual traerá graves repercusiones en política exterior. El panista ve sólo por los intereses de los más ricos, que ni siquiera son intereses nacionales, pues los grandes capitales provienen de otros países.
El PAN trata de mantenerse en el poder mediante trampas electorales y publicitarias y acuerdos cupulares dentro de la clase politica. Frente a ello queda el recurso de la movilización popular, pues esa gente, los corruptos del PRIAN y sus comparsas, no van a abandonar los privilegios que brinda el abuso contra los que menos tienen.
Ni siquiera ha recibido el nombramiento de presidente, ni ha probado haber ganado las elecciones, y ya Fecal, de acuerdo con su personalidad, ha asumido un ánimo dictatorial, a la vez que ha prodigado insultos y agresiones contra quienes no están de acuerdo con él, sean medios de comunicación, como La Jornada, políticos, militantes del PRD, o mandatarios extranjeros.
Algunas estaciones de radio, que tienen su público en sectores como los taxistas, expuestos muchas horas a sus mensajes, tratan de desanimar a la gente para que no asista a la manifestación, a la vez que cultivan el odio y la agresión contra quienes apoyamos el triunfo de AMLO.
Cada día es más evidente el linchamiento televisivo contra AMLO, que protagonizan personajes como López Dóriga y muchos otros, que no pueden evadir su responsabilidad histórica al apoyar los intereses derechistas.
Hay una cohorte de periodistas que han hecho del ataque a López Obrador el tema principal de sus colaboraciones. Al apoyar indirectamente, y algunos incluso de manera directa, la continuidad del PAN en el poder, ellos están promoviendo decisiones como las de procurar la impunidad de la familia presidencial y los corruptos polìticos del blanquiazul, aumentar sus privilegios, preservar las pensiones millonarias que se pagan a los expresidentes; en fin, fortalecer los hábitos monárquicos que ha estado promoviendo el gobierno de Fox.
Asimismo, si Fecal llega al poder es un hecho la privatización de Pemex y el total entreguismo del país a los intereses estadounidenses, lo cual traerá graves repercusiones en política exterior. El panista ve sólo por los intereses de los más ricos, que ni siquiera son intereses nacionales, pues los grandes capitales provienen de otros países.
El PAN trata de mantenerse en el poder mediante trampas electorales y publicitarias y acuerdos cupulares dentro de la clase politica. Frente a ello queda el recurso de la movilización popular, pues esa gente, los corruptos del PRIAN y sus comparsas, no van a abandonar los privilegios que brinda el abuso contra los que menos tienen.
Ni siquiera ha recibido el nombramiento de presidente, ni ha probado haber ganado las elecciones, y ya Fecal, de acuerdo con su personalidad, ha asumido un ánimo dictatorial, a la vez que ha prodigado insultos y agresiones contra quienes no están de acuerdo con él, sean medios de comunicación, como La Jornada, políticos, militantes del PRD, o mandatarios extranjeros.
posted by Edgar González Ruiz at 5:34 PM
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