Más atropellos de Fecal

El rancho incómodo de Diego Zavala
Artículo de Carlos Aguila, reportero balaceado en Ayapango

Felipe Calderón tiene al enemigo en casa: hace mucho tiempo lo desmintió su suegra doña Mercedes Gómez del Campo (ver Quehacer Político número 8, mayo 21 de 2006, pp 4-11), y más reciente el cuñado incómodo.
El atentado que un servidor (Carlos Águila) y su compañero fotógrafo Rubén Darío Betancourt Rojas, trabajadores de la revista Quehacer Político sufrimos el sábado 13 de mayo en el “rancho incómodo” de los suegros de Felipe Calderón Hinojosa, en el municipio de Ayapango, deja entrever hasta dónde está dispuesto a llegar el PAN con tal de no dejar el poder.
Sobre los hechos se levantaron dos denuncias en el municipio de Amecameca y en la Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Cometidos contra Periodistas, de la Subprocuraduría de Derechos Humanos, Atención a Víctimas y Servicios a la Comunidad de la PGR.
La primera se levantó el martes 16 de mayo en la Agencia del Ministerio Público del municipio mexiquense. Los hechos quedaron asentados en el acta número AME/II/808/2006.
La segunda se presentó un día antes en la Mesa 1, en el acta circunstanciada ACO13/FEADP/06. En ambos casos contra quien resulte responsable.
Previamente, durante la investigación, se acudió a las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia en Tlalnepantla, donde un ministerio público del que por obvias razones se omite el nombre, nos reveló que desde el 2003 la averiguación previa Tla/MR/188/2003-2 por presunto tráfico de influencias y desvío de recursos públicos está congelada por órdenes superiores porque “nadie quiere aventarse el tiro”. Y es que finalmente Fecal podría llegar a la Presidencia; de allí el temor por ahondar en las pesquisas.
En el presunto delito podrían estar involucrados el ahora candidato presidencial panista y el ex alcalde y fracasado aspirante a la gubernatura del Edomex, Rubén Mendoza Ayala, que habría “ayudado” a los suegros de Calderón Hinojosa.
El asunto se remonta a cuando Fecal era líder de la diputación federal panista en la LVIII Legislatura –durante el primer trimestre del gobierno de Vicente Fox– cuando por hacer un favor a sus suegros pidió una cuadrilla de trabajadores y maquinaria para la instalación de una toma de agua en el rancho San José de Ayapango.
El delito se habría configurado porque todo habría sido gratis, sin que el municipio “benefactor” registrara esa obra privada; es decir, fue pagada por el erario.
En la investigación judicial se señala a Fecal como el responsable de haber solicitado la ayuda de Rubén Mendoza para hacer llegar el preciado líquido a “la casa de campo” de los padres de la ahora diputada con licencia Margarita Zavala.
Felipe Calderón siempre ha guardado silencio cuando ha sido cuestionado sobre la veracidad de la averiguación, pero la suegra, doña Mercedes, confirmó y desmintió a su yerno, igual que ahora le pasa con el cuñado incómodo Diego Hildebrando Zavala.
El delito por el que fue acusado Fecal y que duerme el sueño de los justos en la Subprocuraduría de Tlalnepantla, fue descubierto por la inconformidad de los trabajadores del OPDM que fueron obligados sin recibir pago a participar en las obras del rancho de los suegros incómodos.


Las chelas
Diego Heriberto Zavala Pérez, suegro de Fecal, concedió una breve entrevista a Quehacer Político, pero cuando supo que era para conocer su punto de vista sobre la agresión (a balazos) por parte del encargado de su rancho, lo tomó a chunga.
Cuestionado sobre qué ocultaba y por qué (según el caporal) dio órdenes de disparar a los periodistas, primero dijo que no tenía nada que esconder para después largar una carcajada y decir que “serán las chelas, serán las chelas”.

Parentela incómoda
Según un hombre ya de edad que presume tuvo amistad muy cercana con el padre de Fecal, éste educó desde pequeño a Fecalito para ser presidente, por lo que a lo largo de su carrera política el ahora candidato se ha sabido rodear de los más oscuros personajes de la ultraderecha mexicana, o sea los panistas.
Familia, país, trabajo y amigos (el nepotismo en su máxima expresión), esa es la escala de valores de Calderón… y vaya si los ha cumplido, al menos hasta ahora y en ese orden.
En la LV Legislatura federal convivió con su suegro, su hermano Juan Luis; incluso ocupaban curul en la misma fila; cuando coordinó la bancada panista en San Lázaro, su hermano Juan Luis era diputado local y su hermana senadora.
Como secretario de Energía, Juan Luis Calderón trabajó en Conagua y cuando su brother renunció al gabinetazo se incorporó al ayuntamiento de Morelia.
Una prima suya, Guadalupe Hinojosa Rivero, fue funcionaria del INM en Puebla hasta que fue despedida en marzo por apoyar a su familiar en la contienda interna del blanquiazul.
Al menos tres de los seis cuñados de Fecal han gozado de las prerrogativas que ofrece el poder (Quehacer Político número 2, pp 4-9 y 16-19, abril 9 de 2006) mediante cargos en el gobierno, en el partido o haciendo negocios con instituciones públicas, además de que una sobrina de ellos, Mariana Gómez del Campo es legisladora local en el Distrito Federal.
En resumen: la familia directa o política de Fecal siempre ha vivido del PAN o en el presupuesto.
Finalmente, las actas siguen su curso y de acuerdo con la PGR y el MP de Amecameca, se nos llamará en cuanto haya adelantos… Ahora bien, conociendo cómo se maneja lo que llaman justicia en este país, pues habrá que ver…